Hace unas horas, en el Museo Guggenheim de Bilbao se han conocido las novedades de la guía Michelin 2014 para España y Portugal.
El protagonista absoluto ha sido el chef madrileño de DiverXo, David Muñoz, que es el único nuevo triestrellado a nivel nacional. Y además es el más joven pues sólo tiene 33 años.
Mi más cordial enhorabuena pues aprecio mucho su cocina. Sí ya era difícil poder disfrutar de una cena en su restaurante ahora será prácticamente imposible.
Afortunadamente siempre nos quedará la posibilidad de seguir acudiendo a su StretXo en el Corte Inglés de Callao en el que apreciar su creatividad desbordante y sus sorprendentes mezclas de sabores y de ingredientes siempre armónicas.
Con él son ocho los restaurantes españoles con el máximo galardón.
El premio a DiverXo ha servido también para que muchos años después de haberse quedado sin ningún representante, Madrid vuelve a contar con un tres estrellas Michelin. Y podrían haber sido dos perfectamente pues Sant Celoni tiene la calidad de un tres estrellas y ha estádo en las quinielas de las últimas ediciones.
Haciendo un resumen rápido del resto de novedades tenemos que Akelarre, Arzak, Azurmendi, El Celler de Can Roca, Martín Berasategui, Quique Dacosta y Sant Pau mantienen sus tres estrellas.
Tenemos dos nuevos dos estrellas, El Portal de Ecahurren, de Francis Paniego en Ezcaray, La Rioja y M.B., de Martín Berasategui, en Guía de Isora, Tenerife. En total tenemos 19 establecimientos con dos estrellas a nivel nacional.
Y 20 locales consiguen su primera estrella y ya contamos con 144 en esta categoría. Algunos de los premiados son nombres muy conocidos como Albert Adría que consigue una estrella en Tickets y otra en 41º, Jordi Cruz que ya tiene dos en Abac consigue otra en L’Angle, El Poblet propiedad de Quique Dacosta consigue una e Iván Cerdeño de la Casa del Carmen en Olías del Rey también logra su primera estrella.
Si contamos todos los galardones tenemos 171 restaurantes con alguna estrella frente a los 158 del año pasado, además los establecimientos que han perdido galardones no lo han hecho por reducir su calidad sino por cierres, mudanzas u otras circunstancias.
Así que la cosecha ha sido algo más jugosa que en ediciones anteriores pero sigue habiendo notables ausencias y una sensación de que Michelin no trata a nuestra cocina como esta se merece.
Sus razones tendrán aunque a nosotros se nos escapen.
Un saludo.
Javier San Martín
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